En primer lugar, es fundamental que los perros pequeños tengan una personalidad más activa y enérgica que los perros grandes. Este debe ser de su tamaño, que les permita moverse con mayor facilidad y velocidad. Por lo tanto, es importante proporcionar suficiente ejercicio y actividad física para mantener a las personas sanas y felices.
Además, los perros pequeños son los más dependientes de lo que les corresponde y pueden mostrar signos de responder o vivir si se los deja solos o se los abandona. Es importante brindarles amor, atención y compañía para mantenerlos seguros y protegidos.
Además, es importante establecer límites claros y consistentes para que el perro pequeño pueda tener su lugar en el juego familiar. Esto incluye establecer reglas de comportamiento, que no permitan exceso de muebles o carga, y recompensar a quienes se comporten apropiadamente.
La amistad es importante para socializar a los perros pequeños desde una edad temprana para que puedan interactuar adecuadamente con otras personas y animales. Esto ayudará a prevenir comportamientos agresivos o temerosos en el futuro.
En resumen, escuchar y controlar el comportamiento de los perros pequeños requiere amor, paz y coherencia. El ejercicio adecuado, la atención y los límites claros ayudarán a garantizar que los perros Sean sean felices y estén bien adaptados. ¡A ti pequeño peludo le encantará con amor incondicional!